El patrimonio natural y cultural debe ser conservado, no sólo resguardándolo de impactos negativos, sino también poniéndolo en valor ante la comunidad con el fin de generar en ésta un sentido de pertenencia y aprecio.
La Gestión del Patrimonio y el Uso Público deben responder a planes específicos que permitan la conservación de los recursos, el uso recreativo de éstos y un permanente monitoreo de su estado de conservación.
Los planes de manejo y programas de conservación garantizan la conservación de los recursos y un uso responsable de los mismos.
Cuando el uso público responde a un plan se obtienen múltiples beneficios:
El mensaje y la imagen institucional están presentes en todos los medios empleados (folletos, circuitos, exhibiciones, etc.)
Los mensajes y la información se transmitirán en forma más efectiva.
No se implementan medios que no serán utilizados posteriormente, concentrando los esfuerzos hacia las necesidades de los visitantes y a institución.
Disminuye el costo de mantenimiento de los medios utilizados (senderos, miradores, señalética) ya que su construcción se desarrollará en base a una audiencia conocida.
Los medios que empleemos tendrán una base sólida que fundamente su existencia.
Nuestra experiencia en sitios de gran valor patrimonial y afluencia turística nos permite desarrollar planes de gestión que responden a las necesidades de conservación y comunicación de cada lugar.